"Soy un vampiro, y tras años y años de experiencia aprendí a soportar la luz del sol, los ajos, y las estacas en el corazón."

~Jack Red

21 mayo 2010

Cara contra nuca

Lo bonito de dibujar círculos alrededor de su ombligo es que detrás de todas las curvas peligrosas de su cuerpo en las que cualquiera se mataría por no salir de ellas
hay esas sonrisas que se adivinan a través del pelo, esos entrelazamientos de dedos que hacen gracia porque sólo se pueden ver en películas que regalan lágrimas,
y hay esos besos en el cuello que hacen que su piel sea envidiable por cualquier gallina.

Es en ése momento, cuando no se me ocurre otra cosa que rascarme la cabeza, decir
"eres tan suave"
y quedarme con la cara de idiota que se me queda siempre que le lanzo un piropo, sonriendo,
como ajeno a los muchos problemas que me esperan fuera de ésa habitación,
como si la vida fuese tan fácil, y qué tonto, cómo no me di cuenta antes.

Menos mal
que ella no me ve pintar sueños en su espalda, porque seguro se reiría de mí, y me diría
"borra eso, o acabaré manchando tus sábanas"
y a mí qué me importan las sábanas, si hace mil vidas que pintó de verde mis días,
durmamos ya, que es tarde, y la noche no durará para siempre,
y el amanecer nos persigue,
y mañana quiero que despertemos así, cara contra nuca,
para que la imagen que resuma mi día, sea tu tierna vuelta en la cama
y tus labios se abran en bostezos,
y los míos vayan en su busca...

1 comentario:

  1. Es precioso, mur...
    Me tienes que decir algún día cómo se te ocurren estas cosas, eh! :D

    Muy bueno!

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