"Soy un vampiro, y tras años y años de experiencia aprendí a soportar la luz del sol, los ajos, y las estacas en el corazón."

~Jack Red

09 enero 2014

Aquel raudo paraíso, la risa del zar Zeta (Comer Comas IX)

Belleza es lo que mi cabeza responde a la pregunta de dónde está ella pues lloviendo sus carcajadas en la felicidad de algún otro al otro lado de esta ciudad casi muerta ya enterrada por la fuerza de sus propias pisadas hace ya un tiempo que la conocí y me hizo volar en sus palabras y tropezarme en mis nervios y para qué me digo para qué sigo insistiendo en frustrar más esta agonía para qué si nunca va a ser mía y todo quedará en ese desasosiego de despertar de un buen sueño soñé soñé con ella  y que estaba aquí pero por desgracia a la realidad esa grandísima zorra no le gusta mi sonrisa y se devana en presentarme a sus imposibles ángeles mientras yo saboreo sus dulces fragancias a medida que pasan a mi lado alejándose para siempre oh joder y dirás pues lánzate a por ellas y yo me reiré porque no hago más que deambular entre diamantes y azaleas palpando lo que me dejan y no de verdad que no hay manera de reconciliar mi hambre de amor con sus pequeños deseos en concreto el suyo el de ella mi espíritu de los veranos pasados que viene a verme de nuevo no sé si para ver qué tal ando o qué tal miento si aun siento o si quiero jugar no lo sé pero ahí está y yo me muero de ganas de decirle te amo bueno me gustas bueno tampoco más bien me interesas o mejor diría que me llamas la atención un tilín que provocas en este ajado corazón mas bien una tenue intuición de depredador un instinto un dejavú joder no me hagas caso divago deliro pero no por nada estoy ahora aquí contándole mis penas a una arrogante pantalla que se las da de terapeuta y que no sabe nada de tu piel tu piel suave que ni siquiera rocé pero siento su tacto en mi retinas mientras recorro todos esos kilómetros de armonía con mi mirada mientras se mueren de celos mis manos y de ganas mi corazón por reinventar el amor bajo unas sábanas y gemirle el mejor de los réquiems a la soledad pero si estoy aquí no es por éxito créeme es por derrota es por resignación por desidia porque aprendí a endurecer la piel antes de recibir una herida y sin embargo idiota de mi le dedico su propia capilla en éste templo de las desesperanzas en este listado de deseos frustrados y se lo dedico sin una sola pausa ni una coma ni un punto que la detengan porque así entró ella y así saldrá de mi vida tan fugaz tan rápida tan cruel y tan bella no merece distracción ni tregua y no le ofreceré distancia desde la que arrepentir un suspiro así que cerraré aquí esta retahíla de emociones esta cascada de sangre del alma alegando como último punto de este ineficaz corolario que por cada sonrisa que imagino en su rosto hay un beso que muere en mis labios.